ÉTICA o PAN

Estamos atravesando un momento difícil, el comercio esta en horas bajas, quizás las mayores de su historia. La libre apertura, esta destruyendo a pequeñas tiendas que intentan subsistir contra grandes espacios comerciales que abren día tras días con unos costes ínfimos o nulos.

Debemos perder nuestra ética por un trozo de pan??. Yo siempre he pensado que es más importante enseñar a pescar que dar peces, no es relevante, en mi forma de pensar, que un cliente no vuelva a buscarme en su futura compra, en este momento se estará usted volviendo loco, en el 90% de los casos al cliente que tiene la delicadeza de entrar en mi puesto de trabajo, vuelve, por una sencilla razón, le atiendo con la verdad como estandarte.

Siempre he tenido claro que un buen profesional debe conocer al milímetro su producto, pero opino que es todavía más importante conocer el producto de mi competencia, de esta manera conoceré mis puntos fuertes y aprenderé con mis flaquezas. Es lógico, no?. Vuelve a pensar, es lógico, pero es real?.

Cuantos profesionales reales conocéis en el mundo textil?. Que puedan hablar durante horas sobre la moda actual, sobre décadas anteriores o incluso sobre que tendencias ve en el futuro?.... Pocos verdad?. En tiempos oscuros, lo peor sale a flote. Debemos tener valores, debemos tener ética.

La moda masculina, es realmente sencilla, esta todo inventado, simplemente se aplican unos criterios que diferentes épocas tienen un mayor protagonismo. Pero lo importante son las reglas de juego, en artículos que por cierto, son los más visitados mes tras mes en el blog, son los de la elegancia en la ceremonia masculina, por una sencilla razón, se explica de una manera clara y sencilla como ir bien, como he dicho en una entrevista para Bloggomoda, se viste mal en este país, y la culpa no nos engañemos es de los que nos dedicamos a la moda.

Si un cliente cuando nos comprara un traje, nos impusiéramos con decisión y le dijéramos: "Caballero en la americana, la camisa debe verse dos centímetros". Todo sería más fácil, el cliente se molestaría, pero al entrar en otra tienda, le repitieran dicha frase como un mantra, comprendería que el desacertado es él. Pero el problema radica en las composturas... los arreglos, cuantos clientes hay que lo primero que te responden al oír la palabra compostura nos increpan diciendo: "A mi no me gusta que me arreglen los trajes, nunca me han dejado bien los arreglos".

Caballero... los trajes no se arreglan, se ajustan. Los trajes no son cómodos, y los pantalones no son unas escobas que limpian el suelo. Estoy a favor del cobro de las composturas, cada día más, el cliente comprende el precio del trabajo de la modista o sastre, el cliente esta acostumbrado a la compostura urgente, por el cliente es un VIP, en serio??. VIP cuando en la tienda donde trabajo, me han dicho textualmente:" Lo que nos ha costado encontrar esta tienda.... en la otra os ubicaba rápido". La tienda antigua, esta al lado de la nueva y por cierto la nueva lleva 8 años abierta, realmente usted es un cliente fiel!.

La razón por la que un cliente quiere evitar las composturas, es por su mala experiencia en tiendas carentes de personal formado para el uso y disfrute de los alfileres, o del personal que realiza las mismas. si un traje queda grande hay dos opciones talla menos o cambiar el patronaje por el de otra marca, pero el cliente siempre se encapricha del modelo del que no hay tallas y aquí empieza el baile.

Si el traje queda grande de encuentros, lo normal es reducirlos, lógico no?. Pues ahora esta la moda de poner placas, hombreras, en cualquier parte, así desaparecen las "arrugas" o "pliegues", al final el cliente parece un soldado con armadura...

El motivo es simple, abaratar costes, una compostura de reducción de hombros y encuentros son dos horas, poner una placa: quince minutos. Calidad contra costes, muchas veces me siento en el programa de Chicote,  donde lo primero que te dicen es que se debe evitar bajar la calidad.

La frase que más utilizo últimamente es: "Con usted caballero, yo no pago la hipoteca!". Vienen a comprar cada 6 años, quieren las composturas para ayer y lo más importante.... Me harás precio, que soy cliente VIP... Debemos ser directos, vendemos moda, si, pero la persona que se pone cara al público, debe ser clara y humilde.

Quizás son los días más fuertes de ventas y me agota tener que repetir los mandamientos de como llevar un traje, pero lo que me hunde, es que el cliente quiera saber sin tener conocimientos. Debemos ser profesionales para poder ser creíbles. Por una compostura no debemos perder valores, es preferible dejar de vender un traje, para ganar un cliente.

Lanzo una pregunta al aire, las tiendas tienen que evolucionar a "cose-todo" de coste 0€??. O es una evolución que solo ocurre en la mía?.