Esta iniciativa se enmarca en la apuesta de La Roca Village por innovar de forma constante en el sector del retail y por crear experiencias de compras memorables para sus huéspedes.
La Roca Village estrena el primer laboratorio de innovación “Smart Boutique”, un espacio que pretende trasladar al visitante la experiencia de compra que encontrará en las tiendas del futuro. En este prototipo de “smart retail”, que estará en funcionamiento desde hoy y hasta el jueves, 17 de noviembre, se exhiben las tendencias y las novedades tecnológicas que mejorarán la experiencia del consumidor.
Se trata de un proyecto que ha sido desarrollado de manera coordinada por un grupo de empresas tecnológicas (Admira, Idneo, Intel, Microsoft y Panasonic) con el apoyo de La Roca Village.
Esta iniciativa coincide con la celebración estos días en Barcelona del Smart City Expo World Congress 2016 y se enmarca en el Catalunya Smart Country Tour. La Roca Village ha sido uno de los escenarios escogidos por la organización para dar a conocer novedades tecnológicas.
En el interior de la Smart Boutique, el cliente descubrirá funcionalidades muy novedosas en el mundo del retail, como el light ID, el object analytics, el vídeo mapping, el virtual fitting room o el robotized virtual assistant.
El visitante que acuda a La Roca Village se sorprenderá con la instalación del escaparate de la Smart Boutique. A través de la tecnología más avanzada, este espacio despertará la curiosidad de los clientes y les invitará a entrar en el espacio. La experiencia de la Smart Boutique comienza con la bienvenida por parte de un robot, que atenderá al cliente y le ofrecerá una atención personalizada. Este asistente tecnológico saludará al visitante y además le invitará a conectarse a la red wifi de la tienda.
Uno de los principales objetivos del comercio del futuro es que los compradores dispongan de información aumentada sobre los productos en tiempo real. Con un sencillo gesto, como es enfocar el móvil hacia el producto, el usuario recibirá información de interés, como el precio, las características, el tipo de tejido (si se trata de una prenda textil) y las unidades disponibles, entre otros detalles. También ofrece la posibilidad de acceder a la página web de la marca del producto
La tienda del futuro apuesta de manera clara por las nuevas tecnologías y el papel, como soporte de información, tiende a desaparecer. Por este motivo, el visitante ojeará el catálogo a través de una pantalla, realizando tan solo el movimiento que se suele hacer al mover una página.
El maniquí de la Smart Boutique no lleva ropa, sino que las prendas se proyectan en el propio expositor. Se trata de una experiencia novedosa que llama la atención al cliente, ya que la tecnología se adapta al sector del retail.
Las largas colas en los probadores desaparecen en las tiendas del futuro. Mediante una pantalla situada en el probador, el cliente obtiene información del producto que ha elegido probarse y también encuentra artículos similares. A través de la pantalla, incluso puede llamar al dependiente de la boutique para pedirle una talla distinta o compartir con sus amigos en redes sociales.
En la recta final de la compra, otra de las experiencias que vive el cliente que visita la Smart Boutique es la del photocall. El visitante se prueba la prenda seleccionada, se hace varias fotografías que recibe en su teléfono móvil y luego las comparte con su grupo de amigos. El cliente sale de la tienda recibiendo una cálida despedida. En la pantalla de la boutique aparece un mensaje en el que le dan las gracias por haber realizado el tour de la Smart Boutique.
La atención personalizada se complementa utilizando los perfiles del cliente en las redes sociales para acondicionar la boutique a su gusto, por ejemplo haciendo que suene en la tienda la música preferida del huésped.
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